lunes, 13 de julio de 2009

La espera

El café de esa tarde tenía un sabor único, tenía el sabor de una constante espera.

Tomé dos sorbos y no aguante lo amargo. En la basura terminó mi paciencia acompañada de aquel café.



2 comentarios:

  1. A veces uno termina siendo inmune a la espera.
    creo que lo peor es cuando abrimos los ojos, y vemos todo lo que pasó mientras esperabamos.

    :)

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  2. lA PACIENCIA, COMO LA ESFERA, OJOS QUE COMANDARAN LA CAIDA

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